Nuestros inmigrantes partían para trabajar en fábricas de Alemania, Suiza y Holanda, una alternativa donde lo más duro era dejar a su familia. También fueron muy importantes las campañas de vendimia y recogida de la «poma» en Francia, donde varios miles de alhameños buscaron un futuro mejor trabajando duro.
Dejen ya de jugar con lo que es de todos
Artículo de Nuria García para Siete Días Alhama Lo sucedido en el Ayuntamiento de Murcia parece ser la primera piedra de la nueva política educativa